En las últimas décadas, las prácticas neonatales han evolucionado y las familias han asumido un papel cada vez más importante en el cuidado de sus bebés en unidades de cuidados intensivos de todo el mundo. El diseño de NICU de vanguardia ahora incluye áreas específicamente para que las familias compartan habitación con sus bebés, así como configuraciones de lugar de trabajo que permiten una integración más fácil de los padres al lado de la incubadora o de la cuna radiante.
Este modelo de atención de asociación se conoce con frecuencia como Cuidado Centrado en la Familia (FCC). La investigación ha demostrado varios beneficios de FFC, desde la reducción de las tasas de mortalidad infantil hasta una mejor vinculación entre padres e hijos. Incorporar a los padres como parte del equipo de cuidado temprano también aumenta la confianza de los padres, lo que facilita la transición cuando el bebé esté listo para ir a casa.
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Las familias con bebés prematuros a veces tienen dificultades para vincularse, sin embargo, esto es crucial para el desarrollo saludable del niño en muchos niveles. El Dr. Prof. Egbert Herting de la Clínica Universitaria en Schleswig-Holstein, Alemania, habla sobre formas de apoyar y fortalecer este vínculo. (Inglés).
El cuidado canguro es la práctica del contacto piel con piel entre el bebé y los padres. Este método se introdujo por primera vez en Colombia como una alternativa a la atención de la UCIN. Hilary Whyte, profesora de pediatría en el Hospital for Sick Children en Toronto, Canadá, discute cómo implementar este tipo de terapia y qué beneficios ofrece. (Inglés).
Cuando un bebé está en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (NICU, por sus siglas en inglés), la familia del paciente se siente instantáneamente aislada en un ambiente extraño y agradece al equipo por el permiso para tener alguna conexión con su hijo.